domingo, 31 de mayo de 2020

Capítulo 11




Salvador  está muy excitado al lado de Fernando. Está muy ansioso a ver que le deseo. Ojala sea una "declaración" de "amor" piensa.
--Es que el otro dia que te traje conocí a una mujer. Muy linda, casi la atropello.
--¿te gustó?
 Fernando sonríe tímidamente:
--espero que no te enojes.
--No claro que no. No está en mis planes enamorarme de ti.
Los dos se sonríen.
--¿no recuerdas haber oído que casi atropellaran a una mujer? Ella es… 
Fernando le quiera contar cómo es esa mujer, decirle que no es una chica joven cómo debe pensar que Salvador no le da tiempo. Por un segundo piensa en su madre pero en seguida deduce que no...  que es imposible. Piensa que si va con mujeres deben ser impresionantes.
--pero yo creo que debe ser alguien que vino de visita.
Fernando se da cuenta que Salvador tiene razón y que sera muy difícil que vuelva a encontrar a esa mujer que le tiene loco.
--oye si averiguas algo... dimelo.
Salvador le promete que lo hará pero nada más bajar del auto ya se le olvida. Sólo tiene pensamientos para el siguiente encuentro


Algunos días después... Mert está leyendo tumbado en la cama. No lleva camisa. Emilio está cerca de él. Lo mira con deseo. Le gusta verlo sin camisa, además el bulto de la entrepierna le llama. 
--¿te puedo hacer una pregunta? --le dice Emilio algo tímido.
Mert deja el libro. Le sonríe:
--si claro... dale.
Mert le hace gestos con la mano para que se siente con él. Lo mira fraternalmente. A Emilio le gusta mucho estar con Mert .
--Mañana te casas.
--Ya hemos hablado de eso. Feli vivirá al lado. No tendremos mucho contacto.
--Si ya se pero no hay fiesta. No hay regalos.
--Me caso porque Feli está embarazada. No hay nada más.
Emilio lo mira y piensa que le gustaría estar en lugar de su Feli. Su primo es guapísimo. Siempre su favorito fue Miguel pero Mert es demasiado  especial para él. De hecho se quedaría con cualquiera de sus tres primos si no pudiera elegir.
--no se vale que te tengas que casar a la fuerza. Eres demasiado lindo como para casarte obligado. Tú puedes tener a quien quieras.
Mert le sonríe y Emilio se derrite. Mert le pone las manos en las mejillas. Por un momento Emilio piensa que lo va a besar. Mert lo mira resignado y le dice:
--No a quien quiera. Créeme que el físico no ayuda mucho para el amor.
Mert se levanta y le da la espalda a su primo para que no lo vea llorar.
--¿estás enamorado de alguien y no te corresponde?
Emilio no puede creer que alguien tan impresionante como su primo tenga penas de amor.
--¡¿¡y quien es la loca?¡ ¡¡por que para no amarte a ti hay que estar mal de la cabeza¡
Emilio está perplejo por lo que acaba de descubrir, Mert lo mira forzando una sonrisa:
--¿vamos a dar una vuelta? ¡te invito a lo que quieras¡
Emilio está feliz.
--¡¡bien¡ vamos donde tú quieras. Tu compañía es lo único que quiero.
Mert le sonríe, se pone la camisa.
--si vamos.
Se van los dos juntos. Aunque a Emilio le duele ver a su primo tan triste está feliz teniéndolo cerca.

Al llegar a su casa, Renzo le informa a Miguel que su hermano ya ha llegado. 
-Sebastián compartirá el cuarto contigo.
Miguel sonrie. Es atractivo, justo lo que necesita. Él y Renzo son gemelos pero el esposo de su madre está descartado. El que sea igual a su padrastro lo hace más excitante. Es su fantasía.
--siempre me gustó eso de convertir a un hetero. A lo mejor ahora lo consigo. --dice para sí.
Pero ya no lo lo siente con las mismas ganas de antes. Sebastian se esta duchando. Como sólo estaba Renzo en la casa  el invitado se ducha con la puerta abierta. Miguel no puede evitar mirar de reojo. Le gusta verlo desnudo mientras se va duchando.
--¡¡estoy mal, estoy mal¡
Se aparta sofocado.
--¡me estoy comportando como un adolescente, la ausencia de sexo me esta matando¡
Siente que no puede seguir así. Necesita coger pero tiene miedo a volver a quedar humillado y cuando piensa en sexo el rostro de Mert viene a su mente.
--¡¡no, con él no¡
Y gime sólo de pensar en él:
--bueno por un polvo tampoco pasaría nada.
Pero Miguel sabe que con Mert no seria sólo sexo.
--¡¡es mi primo, no puedo sentir nada mas¡ ¡¡seria de enfermo¡
El invitado se ha dado cuenta de la presencia de Miguel , sale mojado y cubriendo sus bellas intimidades.
--¡¡me vuelves a mirar las bolas y te rompo la cara maricón ¡
Miguel se hace el ofendido.
--¡¡¿a quién llamas maricón, imbécil¡ Necesito entrar, vi que estabas tú y me iba. No te hagas ideas raras¡¡
--¡¡conmigo no te hagas el tonto¡¡ ¡¡te vi¡
--¡¡tenia ganas de ir al baño y no te vi¡
--¡¡mentiroso  eres un maricon de mierda¡
Sebastián le habla con mucho desprecio. 
--¡¡¡no olvides que ya has intentando estas cosas conmigo, la próxima vez...¡
Sebastián no puede seguir hablando. Miguel puede zafar porque Emilio lo llama por el celular y así puede huir.

Horas después… Emilio ha citado a sus dos primos para hablar de la despedida de soltero de Mert .
--¡le tenemos que hacer algo¡ ¡¡hacer algo los cuatro¡
Emilio quiere demostrar a su primo lo especial que es para él. Salvador y Miguel se miran con nostalgia echando de menos los momentos que vivieron juntos. Ninguno de los dos tenía pensando hacer nada ni les apetece. Emilio no entiende lo que ha cambiado entre sus primos.
--¿¿que les pasa con Mert?? ustedes siempre ha sido muy unidos.
Mira a Miguel , a Salvador. Ninguno de los dos dice nada.
--¿es que nadie me va a responder?
Miguel pone su mano en los hombros de su primo el feo. Emilio se ahoga en el mar de los ojos de su primo. Lo mira y se estremece.
--no te metas.
--pero es que es su despedida de soltero. Deberiamos ir a un sitio de esos de chicas --dice Emilio con timidez.
--No le va a gustar --dice Salvador.
--Me han recomendado este sitio --dice  Emilio mostrando una tarjeta-- ¿vamos?
Mientras Salvador va mirando la tarjeta sin saber como decirle a Emilio que a ninguno de ellos les apetece ver cómo un grupo de mujeres se desnuda, Miguel no puede dejar de pensar en Mert y en todos los momentos de "diversión" que han vivido juntos hasta llegar al sacrificio que está por realizar Mert al casarse para salvarle a él. De pronto Miguel dice a Salvador:
--ve tu con Emilio .... yo me ocupo de llevar a Mert . 
Miguel se va corriendo para sorpresa de Emilio:
--¿y ahora le entraron las prisas?¿como nos va encontrar si no le dijimos donde vamos a ir?
Salvador sonríe. No está muy seguro de que las cosas entre Mert y Miguel vayan a ser fáciles pero almenos confía que las cosas entre los tres vaya a mejor.
--Ya tranquilo, vamos buscando un sitio y luego lo llamamos. --dice Salvador abrazando por los hombros a su primo.
Emilio lo mira. Salvador es con el que menos ha tratado de los tres pero:
--¡¡también es muy guapo... y es que todos mis primos son impresionantes¡ ¡¡con cualquiera viviría unas locas noches de sexo... y a poder ser con los tres¡ --dice Emilio para si bien cachondo.

Mert está sentado en la cama mirando fotos de los cuatro primos. Mira con especial interés a Miguel :
--¿cuando pasó esto?
Le duele lo distancia que está de Miguel . Llaman al timbre.
--¡otra vez Emilio perdió las llaves¡ 
Abre sin preocuparse y se topa cara a cara con Miguel .
--¿tu?
Los dos se miran y se estremecen. Sienten que el corazón se les va a salir de la garganta. Sienten que el alma de uno golpea al otro.
--¿puedo pasar? Necesito hablar contigo.
--Si claro.
Mert le hace pasar. Cierra la puerta. Hay un silencio entre los dos. Ambos se quieren decir demasiadas cosas pero Mert no cree que Miguel quiera escucharlas y Miguel no sabe bien por dónde empezar.
--Me alegro de verte --dice Mert para romper el silencio.
--¿y que hacias?
Miguel está muy nervioso. Mert le sonríe.
--estaba mirando fotos de cuando nosotros éramos chicos pero no creo que hayas venido para eso ¿¿que me querias cortar?
--Pues la verdad es que yo... 
Miguel empieza a balbucear sin decir nada en claro. De nuevo se hace el silencio que una vez más rompe Mert :
--¿quieres tomar algo? Con unas cervezas estaremos más tranquilos.
Miguel le hace que si con la cabeza. Mert va a la cocina. Ahora que no lo está mirando a los ojos, Miguel tiene el coraje suficiente para decir:
--Me pasan cosa contigo.
Mert se gira emocionado. No se lo puede creer:
--¿¿en serio?
Los primos se miran con profundidad




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