domingo, 31 de mayo de 2020

Capítulo 8


Miguel se viste algo molesto. Salvador lo mira sorprendido.
--¿¿qué te pasó?
--¡¡ nada¡
--es que nunca habías fallado de esa manera.
Miguel estrella a su primo contra la pared. Salvador sigue desnudo.
--¡¡a ti qué te pasa¡ ¿¿es que acaso no lo hemos hecho?
Salvador no entiende que le está pasando a su primo.
--¡¡oye a mi no me grites que el que has acabado en segundos has sido tú. Tu te habras quedado muy relajado pero yo no me he enterado de nada de nuevo me has dejado a medias y cachondo ¡
Para no golpear a su primo Miguel da un golpe a la pared.
--¡¿¿y te parece poco lo que me esta pasando? 
Se lleva las manos a la cabeza desesperado. Salvador lo mira sin entender:
--A mi tambien me jode que se haya roto el vínculo que teníamos, Mert ...
Miguel se estremece al oír el nombre de su primo pero para que no se le note se enoja.
--¡¡no me lo menciones¡ ¡¡ni vuelvas a decir su nombre delante mio¡
A Salvador le sorprende la rabia de su primo hacia Mert .
--¿no será que a ti también te gusta y eso es lo que te tiene mal?
la respuesta de Miguel aún hace sospechar a Salvador que esto sea así. Lo tumba de un puñetazo:
--¡¡somos primos... una cosa es que nos divirtamos y otra cosa es el amor¡ ¡¡amor entre primos¡ ¡¡no¡
Se nota que hay algo que lo atormenta, algo que está pasando dentro de él y que ni siquiera así mismo se permite reconocer.  Miguel se arrepiente de su arranque, trata de ayudar a su primo. Le agarra del brazo para ayudarlo a levantarse.
--perdóname primo, no se que me pasó pero es que tu también... ¡¡con según que cosas no se juega¡
Salvador está dolido con su primo:
--¡vete al diablo¡
No lo perdona. Se viste a toda prisa. A Miguel le duele no encontrar el apoyo de su primo.
--¡¡al diablo tú¡
Miguel se va con los pantalones desabrochado y la camisa en la mano.  Salvador da una patada a la pared.
--¡¡¿¿porque demonios Mert tuvo que abrir su bocota¡¡
En realidad no sabe de los motivos que llevaron a Mert a hablar de lo que era un secreto a voces para los primos buenorros pero que preferían ignorar. Está triste, con ganas de sexo. Su mirada se llena de luz. Suspira.
--Fernando...
En realidad nunca ha disfrutado tanto con un hombre como con él. Ni con sus primos. Desea volver a verlo. Marca con ansiedad su celular.
--¡¡ojalá quiera verme¡
Fernando en esos momentos está fornicando con Gato.
--¡¡no tomes la llamada¡ --jadea Gato que se encuentra debajo.
Fernando aprieta con fuerza su cuerpo al de su amigo.
--¡¡no pensaba hacerlo¡
A Salvador le duele que no le tome la llamada.
--Con lo guapo y experto que era ¡¡debe tener miles de citas¡
Le duele ser uno más pero le gusta demasiado ese hombre y está dispuesto a aceptar lo que quiera. Le deja un tímido mensaje.
--nada... pues... Soy Salvador... Espero que te acuerdes de mi... Pues nada, tenía ganas de verte... me hubiera gustado que fuera esta noche pero ya veo que estás ocupado... Espero no molestarte... llamame si puedes...
Salvador se queda ansioso.
--¡¡ojala me quiera ver¡
A él el impresionante buenorro lo ha dejado marcado. Salvador es consciente que ha sido uno más y le duele pensar que nunca más vaya a verlo.


Miguel no sabe bien donde ir. Casi sin darse cuenta va hacia el bloque en el que vive Mert con Emilio. Se queda mirando al balcón. Ni sabe que hace, que pretende. Sólo piensa en Miguel. En los momentos que pasaron juntos. En su amistad, en su cariño. En el sacrificio por amor de Mert . En la confesión de amor. Sus ojos se llenan de lágrimas:
--ya nada puede ser como antes... No.
por un momento duda.
--¿no puedo?
Es solo un instante de debilidad. 
--¡¡soy un tarado y menos ahora que ya hablè con mi padre¡
Se maldice así mismo.
--¡¡¿¿porque he sido tan bocafloja?¡
Sabe que su padre ahora estarà vigilando a Mert y no se podrán divertir con facilidad.
--Además si se mezcla el amor ya no es diversión.
Piensa en sus familias. En el escándalo que harían de saber de sus juegos pero una cosa es sexo puro y duro y otra muy distinta el amor. Almenos así lo siente.
--No ¡¡amor no puede ser¡
En realidad es algo que le da demasiado miedo porque no se imagina enfrentándose a toda su familia.  Mert y Emilio están llegando. Los dos en moto. Emilio muy abrazado a él. Mert es muy cariñoso con Emilio. Miguel se esconde para que no lo vean. Lo observan con ciertos celos.  Le gustaría  vivir una relación de amistad como la de ellos. Si supiera que Emilio pensaría lo mismo. A Emilio le gustaría vivir lo que han vivido sus primos .Como presintiendo que su amado primo está cerca Mert se gira y mira justo en el lugar donde tras un árbol esta Miguel . Miguel siente que el corazón se le va a salir del pecho. No quiere tener que dar explicaciones y menos ante Emilio. Confía que no lo descubra. Emilio sigue muy pegado a Mert :
--¿¿qué te pasa?
Mert sonríe.
--No nada.
Presintiò al amor pero sabe o cree que es algo imposible. Abraza fraternalmente a Emilio y entran juntos. Miguel se tranquiliza, se va. Se le escapa alguna lágrima. 


Fernando se levanta desnudo para revisar su celular. Gato  está en la cama.
--¿quien te llamó?
Con cara de depravado Fernando dice.
--Salvador.
--¡dile que venga y lo compartimos¡
mientras que Fernando le marca hace que no con la cabeza.
--aún es pronto.
Gato  se levanta de la cama desnudo:
--¡¡eres un egoista¡
Los dos se miran divertidos. Salvador se excita al escuchar la voz de Fernando.
--¡¡si, voy donde tu quieras¡
Fernando se viste para ir a buscarlo. Gato  se acerca a èl:
--nunca has ido a buscar a ninguno ¡¿tanto te gusta èl?
Fernando se pone solo los jeans.
--me gusta su ansiedad pero no, no es especial. Simplemente no quiero la oportunidad de ver si veo a la mujer que me prendó. Es su vecina, èl debe saber quien es.
Fernando suspira. Se estremece al pensar en esa mujer que casi atropellò.




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